Estimado/a compañero/a:
El miércoles 11 de noviembre hay huelga educativa en Cantabria convocada por STEC, ANPE, TU, CCOO y UGT. El motivo del paro no es sólo la alteración del calendario escolar como pretende hacer creer la Consejería, sino todos los problemas que se vienen acumulando desde hace meses y ante los cuales hemos intentado colaborar responsablemente, sin encontrar nunca una respuesta positiva de la administración.
El último conflicto que hemos tenido, el de la modificación del calendario escolar, ha sido la gota que ha colmado el vaso, aunque la manera de actuar de la Consejería no ha sido diferente a la que ha tenido en cuestiones anteriores: falta de diálogo, manipulación de la opinión pública y desconocimiento de cómo funciona el sistema educativo.
Con la huelga del 11 de noviembre exigimos un cambio de política en lo que a la gestión de la pandemia en los centros educativos se refiere: exigimos que se cumplan realmente todas las medidas de seguridad que se han proyectado en normativas, protocolos y planes de contingencia, que se contrate todo el profesorado necesario para desdoblar grupos y así mantener distancias de seguridad reduciendo ratios, que se emplee en la red pública (y no que parte vaya a la privada) todo el dinero procedente del Fondo COVID que ha recibido el Gobierno de Cantabria, que se mejoren nuestras condiciones de trabajo abordando temas como la situación de los coordinadores COVID o el personal vulnerable, regulación del teletrabajo en los escenarios 2 y 3, etc.
Tenemos por delante un curso largo y muy duro. La actual consejera de Educación no forma parte de la solución a nuestros problemas; es un problema más. El profesorado de Cantabria se merece que al frente de la Consejería esté una persona que tenga capacidad de diálogo, que no falte a la verdad manipulándola, y que conozca mínimamente el sistema educativo. Marina Lombó no reúne estas cualidades; es por ello que la huelga del miércoles es un paso más en las movilizaciones que iniciamos hace diez días y en las que el lema principal fue y sigue siendo LOMBÓ DIMISIÓN.
Por último, el tema de los servicios mínimos fijados por la Consejería va suponer que muchas personas no puedan sumarse a la huelga y sólo puedan solidarizarse desde el centro con el paro. Esto implica que el porcentaje de seguimiento va a depender de aquellos que podamos ejercer este derecho: por ti y por todos los compañeros y compañeras. Es por todo ello que desde el STEC hacemos este llamamiento a que secundes la huelga y a que animes a tus compañeros/as a hacer lo mismo. La enseñanza pública de Cantabria, y nosotros como enseñantes, nos jugamos mucho y no podemos quedarnos quietos ante todo lo que viene pasando.
Recibe un cordial saludo.
Secretariado del STEC